Autoridades de EE.UU. confiscaron el cargamento de cuatro tanqueros que supuestamente trasladaban gasolina de Irán con destino a Venezuela, en una nueva escalada de tensiones contra dos gobiernos a los que Washington se opone.
Según informaron fuentes oficiales estadounidense al diario The Wall Street Journal y a la agencia de noticias Reuters, las cuatro embarcaciones fueron incautadas sin el uso de fuerza militar y su carga fue pasada a otros buques para su envío a EE.UU., tras conversaciones con los propietarios de las naves.
El embajador iraní en Venezuela, Hojat Soltani, negó que su país tuviera algo que ver con los barcos, aunque no negó la procedencia ni la propiedad de la carga.
“Otra mentira y guerra psicológica de la máquina de propaganda de EEUU. Los barcos no son iraníes, y ni el dueño ni su bandera no tiene (sic) nada que ver con Irán”, escribió en Twitter.
Washington ha acusado con anterioridad a Irán de utilizar buques con banderas y dueños extranjeros para violar las sanciones, que intentan impedirle la venta de combustible para recortarle ingresos como castigo por el supuesto desarrollo de su programa nuclear.