Se destacan las multitudiarias marchas en Berlín y Londres
La policía de Berlín fracasó en su intento de lograr la prohibición “in extremis” de la manifestación contra las restricciones por la pandemia convocada para este sábado por grupos negacionistas de la COVID-19.
La Audiencia Territorial de Berlín-Brandeburgo rechazó de madrugada el recurso presentado por la vía de urgencia por el estamento policial contra la convocatoria de esa marcha, que ha movilizado a miles de seguidores de todo el país hacia la capital.
Unos 1.500 manifestantes se concentraron ya el viernes ante la emblemática Puerta de Brandeburgo, a modo de acción previa a la marcha de este sábado.
La mayoría de los asistentes acudieron sin mascarilla, dispuestos a celebrar que una instancia judicial inferior hubiera derogado un primer veto de las autoridades de la capital y ciudad-estado.
La intención de prohibirla generó una fuerte controversia en torno al derecho fundamental a la manifestación y el respeto a las medidas impuestas frente a la pandemia.
El responsable del Interior del gobierno regional de Berlín, el socialdemócrata Andreas Geisel, justificó su veto en la experiencia de la manifestación del 1 de agosto. El derecho a la manifestación no significa el derecho a infringir la legalidad”, afirmó.
Las manifestaciones contra las restricciones han venido sucediéndose en Alemania desde julio, en ocasiones con decenas de miles de participantes.
Entre marzo y abril, momento álgido de la pandemia en Alemania, las cifras de contagios se habían situado en los 6.000 diarios.
Hoy la Policía de Berlín ha ordenado la interrupción de una marcha en la que participaban unas 18.000 personas en contra de las regulaciones para hacer frente a la pandemia de coronavirus. La mayoría de los manifestantes iban sin mascarilla y sin respetar la distancia de seguridad.
“Desafortudamente, no tenemos otra opción”, ha dicho la Policía en Twitter. La mayoría de los participantes se han retirado pacíficamente, aunque las autoridades han reportado algunos disturbios, como calles bloqueadas o quema de contenedores.
La marcha fue autorizada a primera hora de este sábado por un tribunal administrativo tras días de tensión por la prohibición inicial del Ayuntamiento de Berlín. El consistorio alegó el riesgo de incidentes violentos, violaciones de la normativa sanitaria y posible presencia de elementos de ultraderecha. En previsión de posibles altercados, la Policía montó un importante despliegue con 3.000 agentes situados en puntos calientes, como la histórica Puerta de Brandeburgo.
Los organizadores, Querdenken 711 (Pensamiento Lateral 711), habían planificado una larga marcha y concentración para la que se habían inscrito alrededor de 22.000 personas.
Sus partidarios protestan contra la “dictadura” de las medidas por el nuevo coronavirus que consideran un obstáculo para su libertad. Exigen la caída del Gobierno de Angela Merkel y nuevas elecciones en octubre del 2020, es decir un año antes de lo previsto.
Por su lado, una similar expresión pudo verse en la calles de Londres, donde los manifestantes eligieron Trafalgar Square para expresar su repudio a las restricciones.